He visto muchas imágenes y vídeos por Internet en los cuales aparecen determinados famosos diciendo cosas que en realidad nunca han dicho, es lo que se conoce como DeepFake.
La I.A. (Inteligencia Artificial) tiene una repercusión negativa en la sociedad actual donde la tecnología se usa cada vez más y un claro ejemplo lo está llevando a cabo el termino «DeepFake». La inteligencia artificial está robando muchos puestos de trabajos a día de hoy pero también es cierto que se está empleando para engañar y crear confusión en la sociedad.
¿Qué significa DeepFake?…
Se trata de una composición de los terminos «deep learning» y «fake», o lo que es lo mismo, «aprendizaje profundo», una de las ramas de la I.A. y «falso». En realidad el nombre le viene como anillo al dedo, ya que estamos hablando de una tecnología basada en inteligencia artificial para superponer el rostro de una persona en el de otra y falsificar sus gestos. De esta manera nos harán creer que están haciendo o diciendo algo que en realidad no ha pasado.
Los primeros vídeos falsificados con esta tecnología se empezaron a ver hace un par de años. En ellos se habían manipulados los rostros de varias actrices internacionales, como Natalie Portman o Emma Watson, para que encajaran en cuerpos de actrices de la industria pornográfica.
Con el paso del tiempo, dicha tecnología ha ido evolucionando y los resultados son cada vez más sorprendentes, a la vez que y preocupantes. Se han conseguido crear vídeos de los principales líderes del mundo dando un discurso completamente falso. ¡Lógicamente! hay vídeos de humor, pero otros son muy difíciles de distinguir.
¿Cómo podríamos saber que estamos ante una imagen falsa?…
Esto plantea un serio peligro. Lo que antes requería de cientos de horas de edición, con equipos y profesionales expertos trabajando en ello, ahora con un software en pocas horas cualquiera puede crear un vídeo falso pero muy creíble. Ya es bastante difícil controlar las fake news o noticias falsas que corren por la red, sobre todo en épocas electorales, como para encima sumarles ahora este tipo de engaños.
Por ahora la distinción entre un vídeo real y un deepfake radica en que en el vídeo falso, las personas parpadean menos de lo normal, ¿cuánto tardarán en corregir ese error?, de haberlo hecho ya a estas alturas, estaríamos hablando de un serio problema a la hora de poder conocer cuál es el vídeo real y cuál no.
¡Cuidado con los selfies que compartimos en las Redes Sociales!…
La facilidad con la que alguien podría hacer esta producción es aterradora, pues con unos mínimos conocimientos de algoritmos de aprendizaje profundo, y suficientes imágenes del rostro que buscamos hackear. Muchos ya están creando bases de datos en expansión de nuestros propios rostros en las RRSS: según un informe elaborado por Honor en 2020, que analizó los hábitos a la hora de tomar fotografías de los ciudadanos de distintos países europeos, los españoles son los europeos que más selfies se toman: de media, 728 selfies al año, hackearlos es cuestión de tiempo.
Tanto la industria tecnológica como el ámbito académico se afanan en desarrollar soluciones que permitan automatizar la detección de material multimedia falsificado (vídeos, imágenes y grabaciones de voz) mediante el uso de inteligencia artificial.