¿De Dónde Proviene La Fortuna?

¿De dónde proviene la Fortuna?

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VeraSoul Historia
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¿De Dónde Proviene La Fortuna?

Fortuna era, en la mitología romana, la diosa de la suerte, buena o mala, aunque siempre se tendió a asociarla con lo bueno –lo fasto– y la fertilidad; de modo que la adversidad ha pasado a ser casi sinónimo de infortunio o «algo desafortunado».

Aunque recibió multitud de advocaciones  y su culto se extendió por igual por clases sociales diferentes, fue muy venerada por los militares, hasta el punto que Julio Cesar decía que ¿en todo puede mucho la Fortuna y más en la guerra¿ (Bellum Gallicum, 6,30,2). Muchas unidades militares utilizaron a la diosa como madrina, e incluso el porcentaje de inscripciones en honor a Fortuna es muy elevado en provincias con fuerte presencia militar, como lo eran las regiones fronterizas de Germania, Dacia o Britania.

Su alegoría solía ser la rueda de la fortuna, una especie de ruleta que significaba el azar o lo aleatorio de la buena o mala suerte; en cuanto a representación de su aspecto positivo, solía figurársele con la cornucopia. Adjunta a Fortuna estaba la Ocasión (muchas veces confundida con la misma Fortuna), la cual se representaba casi totalmente calva, con sólo una guedeja o un mechón pequeño, ya que una buena Fortuna era entendida como de una Ocasión difícil de atrapar (como es difícil de atrapar de los cabellos a alguien calvo), en otras representaciones Fortuna aparecía figurada de un modo semejante a la Justicia: con los ojos velados o con un timón ya que pilotaba la suerte de la humanidad.

Generalmente, Fortuna fue considerada una Diosa benigna, sin embargo, luego fue vista como una Diosa impredecible en sus actitudes.  En pinturas de manuscritos medievales, Fortuna es tradicionalmente representada con sus ojos tapados, sugiriendo la arbitraria y sorprendente naturaleza del cambio.  También era mostrada con dos caras, una sonriente y infeliz.

La diosa Fortuna era casi siempre considerada fasta («afortunada»,positiva para la gente), se distinguían con adjetivos sus otros posibles aspectos: Fortuna Dubia (Fortuna Dudosa), Fortuna Brevis (Fortuna Breve) y Fortuna Mala. En lo único que coincidieron todos fue en señalar que era la diosa más caprichosa del Olimpo. El culto a Fortuna fue introducido en Roma por Servius Tullius, teniendo en tal ciudad un templo en el Forum Boarium y un santuario público en la colina del Quirinal (o Quirinales), poseía un oráculo en Praeneste y le estaban consagrados el roble -en Praeneste o Preneste se adjudicaba un trozo de roble a cada recién nacido, según el modo en que sucedía esto se suponía que el recién nacido tendría su fortuna, asimismo a Fortuna le estaba consagrado el día 11 de junio, durante toda esa fecha se realizaba un festival que se llamaba Fors Fortuna; se le consideraba también la propiciadora de la maternidad

A esta deidad se le decía también Annonaria y el nombre provenía del antiguo itálico Vortumna (La que rota -hace girar- el año); no se conoce una genealogía mítica canónica o establecida de tal deidad pero se la consideraba hija de Júpiter tal como lo señala una inscripción en el santuario de Preneste y de Juno -una estatua representa a Juno dando de mamar a Fortuna-. Como una de las deidades que ejercían patronato de Roma se le apelaba Fortuna Populi Romanii (La Fortuna del pueblo de los romanos).

Vía:Wikipedia

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