Uno de los dispositivos más importantes relacionados con la seguridad es el casco de los pilotos. A primera vista puede parecer un casco normal o similar a los que llevaban los pilotos de los años 70 y 80, pero no tiene nada que ver. El diseño subyacente y la tecnología de construcción han evolucionado de manera radical.
A mediados de los 80 un casco pesaba unos dos kilos. Este peso aumentaba considerablemente bajo la influencia de la fuerza G en las curvas o en las frenadas. Con este peso también corrían el riesgo de sufrir lesiones en el cuello. Así que los fabricantes se centraron en disminuir peso y aumentar dureza.
Actualmente los cascos tienen una dureza muy superior a los de antaño, y su peso ha descendido considerablemente (ahora pesa 1,25 kilos). Los nuevos cascos ofrecen una combinación de fuerza y flexibilidad (vital para absorber la fuerza de impactos grandes, tal y como hemos comprobado con el accidente que ha sufrido Felipe Massa).
Utiliza materiales de última tecnología, como son la fibra de carbono o las mezclas de resina. Tiene una capa que es muy fuerte, y esta hecha del mismo material que los chalecos antibalas. La capa exterior es de poliestireno, deformable, cubierto de un material resistente al fuego.
La visera esta hecha de policarbonato especial, de colores claros para que permita una perfecta visibilidad. También es resistente al fuego. Cuando brilla el sol las viseras elegidas son ahumadas, como las gafas de sol, pero cuando esta nublado o llueve las viseras son completamente claras, además cuentan con sustancias químicas anti niebla para que siempre este en condiciones optimas. Y si la visera se mancha no pasa nada, los cascos llevan adhesivos transparentes en la visera que se pueden quitar para que la suciedad no les impida ver.
Los ingenieros se preocupan cada vez más por la aerodinámica del casco. Pensando que la cabeza del piloto esta ubicada justo debajo de la chimenea por la que entra aire para ventilar el motor, los ingenieros tratan de desviar el aire del casco hacia la toma de aire.
El casco también debe proporcionar ventilación para el piloto. Así que en distintas zonas del casco se ubican pequeñas tomas de aire. Estas entradas de ventilación cuentan con filtros para que no entre suciedad.
Posiblemente una de las partes que más gusta a la gente es el pintado del casco, un trabajo realizado por un experto que le da color a mano. Requiere cientos de horas para un diseño complicado. La mayoría de pilotos utilizan varios cascos cada temporada.
La FIA actualmente se preocupa cada vez más por la seguridad de los pilotos, dentro de poco se presentará la nueva generación de cascos de Fórmula 1, a la que la han llamado “el súper casco”. La FIA ya ha aplicado medidas recientes en cuanto a seguridad se refiere. Sólo hay que recordar la instalación del HANS (Head And Neck Support) como medida obligatoria (utensilio que se acopla en el cuello de los pilotos y en el monoplaza para facilitar la sujeción de la cabeza del piloto) Para más información sobre el HANS siga leyendo el punto 6.